lunes, 2 de abril de 2007

Érase un sábado, o mejor dicho, Perdición Parte Dos

Y así llegó un sábado, un sábado musical y glorioso en la tarde, oscuro, ruidoso y libidinoso en la noche...


Primero, es menester mencionar que la tarde se desenvolvió mil veces mejor de lo planeado, esos ruidos estruendosos que algún día fueron amorfos, ahora son música preciosísima, aquellos pequeños momentos de esa tarde en los que cada instrumento parecía discutir con los otros, ahora son excelentes compañeros de puterías y borracheras. Luego, las chelas post ensayo fueron también célebres, marcaron el hito de la integración "bandil".

En fin, ahora sí, al condumio del post:

Luego de que (robándome expresiones del Ludo) estos dos malos sujetos me sacaron de la casa, me decidí a caer al antro de perdición, dónde mis amigos estaban, fui recibido con amorosos abrazos... En plan original, sólo los saludaría, pues mis economías no me daban para farrear, beber y regresar a mi casa en un auto de placas naranja, simplemente daríamos una vuelta, y pronto embarcaríamos de regreso al hogar... ¡PERO NO! Oh destino que te ensañas con los seres, y que los haces gozar como animales, me llevarías a un lugar donde el hígado se vuelve un infame trozo de carne prácticamente inservible. Fueron uno, dos, tres, cuatro, cinco, siete, nueve, doce, catorce, veine, treinta, cincuenta... no sé, pero harto vodka con tónica y limón, además de algunos aguardientes "Por la mamá de ellos, que los hizo tan bellos, pa' pichar con ellos"(Andy, ¡Eres el mejor!) fueron suficientes para que mi estado sea oficialmente etílico...

Hé aquí el malvado ser que ayudó en la embriaguez con la frase "Ay amigo, de aquí no salimos sobrios". Andy, ¡se te quiere full!

Ok, mientras los vodkas iban y venían, varios sucesos acontecían súbitamente, primero, el líbido se disparó a niveles suprahumanos, la testosterona pululaba en aquel lugar y yo, corto, (aunque fuera de todo pronóstico) no me quedaría. Aquí una muestra del suceso:

Quésfs, sin comentarios...

Señores, señoras, señoritas, señoritos, cucos y cucas, por pudor y buenas costumbres, no me es posible describir a lujo de detalles en un medio tan público la magnitud de los sucesos, pero basta con mencionar una línea de una estrofa de una canción ya un tanto antigüita "... hardcore soft porn ...", aunque con ropa, eso era...

Fueron uno, dos, tres y cuatro los sujetos que intervinieron en aquel suceso cuasisexual pero muy homosexual, de los cuales, apenas de uno el nombre conocía, fueron horas las que se sucedieron para poder conocer las identidades (aunque sean apenas los nombres) del resto de entes... En fin, creo que este punto se concluye a sí mismo.

Nota, los cuatro estaban bien bonitos, creo... o mejor dicho... espero, eran muchos los embellecedores que cargaba encima.

Y este fue el majadero que no se chumó, ¡A otro que se le quiere hasta decir basta!

Ok, lo antes mencionado me convierte, oficialmente en una perra ravalera, ocasional, por supuesto, pero perra ravalera a la final. Lo cual, debido al nivel de endorfinas que ha liberado en mi, es un calificativo que decido llevar con la frente en alto y con mucho placer, claro, es algo que no entiendo como muy saludable si es que se abusa, motivo por el cual me propongo fielmente el "low profile" en todos estos aspectos y espacios.

Bueno, lo importante es que lo gozado nadie me lo quita, y lo perreado menos...

4 comentarios:

Chivis dijo...

Lo bueno de ir en el auto después del el suceso, con el sujeto aun etílico, es que las partes censuradas son menores a las del post. jajaja

…aunque igual aun censuradas…
(rabalera, baracunata, baracunatana)

Unknown dijo...

juas juas. Y después dices que "todo es fresco en el Black" juas juas. Oiga compadre, no tenía idea de la magnitud de tus aventuras hasta ahurita. Entiendo las razones de tu chuchaqui!!!

Aunque eso de acto cuasisexual me llena de temor!

LaÜ dijo...

jaja.. ya era hora JO!! bien que necesitabas "perrear". En serio espero que si esos sujetos involucrados en el asunto no eran bien lindos... que tampoco ellos se acuerden (para evitar encuentros indeseados).
Espero que ya no estés chuchaqui. :)

Anónimo dijo...

Vaya, ya sabía que habías gozado a un punto casi sexual, y me complace saber que has dado un concepto diferente de la palabra "perrear", ya no es un sucio baile sino una forma sutil de ser una ravalera free lance, jejejeje.

Saludos José, y espero poder también "perrear" aqui en Quito (hace falta) jeje